PÍDEME LO QUE QUIERAS.

PÍDEME LO QUE QUIERAS.

Autora: Megan Maxwell.

Género: Erótico.

Sinopsis: Tras la muerte de su padre, el prestigioso empresario alemán Eric Zimmerman decide viajar a España para supervisar las delegaciones de la empresa Müller. En la oficina central de Madrid conoce a Judith, una joven ingeniosa y simpática de la que se encapricha de inmediato. Judith sucumbe a la atracción que el alemán ejerce sobre ella y acepta formar parte de sus juegos sexuales, repletos de fantasías y erotismo. Junto a él aprenderá que todos llevamos dentro un voyeur, y que las personas se dividen en sumisas y dominantes... Pero el tiempo pasa, la relación se intensifica y Eric empieza a temer que se descubra su secreto, algo que podría marcar el principio o el fin de la relación.

MI OPINIÓN: (CUIDADO, CONTIENE O PUEDE CONTENER SPOILERS): después de leer varios libros de terror, thriller y demás, me apetecía cambiar de registro, y leer o bien novela chick lit, romántica o erótica, y al final me decanté (tras ver diversas opiniones), por este libro, que es de contenido erótico erotiquísimo, y que se compone de una trilogía.

No sabía si me iba a gustar, porque me encanta Megan Maxwell, pero como ella siempre escribe chick lit, pues no sabía si en el terreno del erotismo me iba a enganchar.

Pues vaya si me engancha, a aquellos/as que digan que si se parece a la trilogía de 50 sombras de Grey os diré que NO, NO Y NO!!!, no tiene nada que ver con la mierdaca de 50 sombras.

Solo me he leído este, y ya he comenzado el segundo, pero os digo sin temor a equivocarme, que me van a encantar los otros dos.

Aquí en esta historia, no se trata el sado para nada, pero si hay tríos, intercambio de parejas, orgías, voyeurismo, muchísimo morbo y muchísimo sexo, detallado con pelos y señales, todo explicado tan explícitamente que es bastante fácil dejarse llevar e imaginar todo al detalle.

En este caso, y como bien dice la sinopsis, Judith Flores es una chica española, andaluza para ser más exactos, que trabaja de secretaria en una empresa alemana que está en Madrid.

El jefazo, un rubio alemán con unos ojazos azules que quitan el hipo, Eric Zimmerman, decide viajar hasta allí porque su padre ha muerto, y es él quien ahora tiene que encargarse de todo.

Y cuando posa sus ojos en la chispeante Judith, ya no puede dejar de pensar en ella, y en lo que le quiere hacer (hablando claro), que se la quiere beneficiar.

Pero Eric no es de los que les va el sexo convencional, le gusta muchísimo el morbo y disfrutar de su vida sexual, así que está metido en todo, tríos, orgías, voyeurismo, intercambio de parejas, y utiliza todos los juguetes sexuales habidos y por haber.

El tío es puro sexo y puro morbo, y aunque al principio Judith es reacia a probar todo lo que su jefe le ofrece, poco a poco lo hace y le va gustando tanto, que es ella quien acaba pidiéndole más.

De la mano de Eric, Judith prueba absolutamente todo lo que él le pide, y accede encantada porque descubre que a ella, el sexo convencional ya no le satisface, necesita mucho más.

Por supuesto Eric tiene un secreto, pero no es como el de Grey en 50 sombras, este tiene un problema más grave y real que no desvelaré, y que puede acarrearle problemas muy serios.

Yo al principio no entendía ciertas actitudes y comportamientos de él, pero una vez resuelto ese enigma, lo comprendí perfectamente.

Y me gusta que la protagonista no sea una pava, una sosa o una blandengue idiota como lo es Anastasia Steel por ejemplo (la de 50 sombras).

Judith es jerezana, tiene gracia, salero, es chispeante, tiene un carácter fuerte, no se deja influenciar ni manipular por nadie, y sobre todo tiene las ideas muy claras, sabe lo que quiere y lo que no.

Practica motocross, karate y es entrenadora de futbol de niñas en su tiempo libre.

Eric es poderoso, multimillonario y super atractivo, dominante, seguro de si mismo y acostumbrado a que todo el mundo haga lo que él diga, con sus problemas y sus paranoias, pero son creíbles y tienen fundamento.

Tambien se habla del tema de las parejas que practican ese tipo de sexo, diciendo que no sienten celos cuando ven a su pareja practicando sexo con otras personas, porque saben separar perfectamente su vida sexual, de su vida sentimental.

Y en este caso, Eric y Judith practican todo tipo de sexo, pero siempre estando juntos, y luego son una pareja perfectamente normal, que se quieren.

Lo recomiendo, porque a los/las que os guste este tipo de libros, vais a encontrar todo lo que queréis y más, porque todo está descrito al detalle, no es vulgar aunque si explícito, la autora sabe narrar todo con un lenguaje sencillo y nada rebuscado, con expresiones muy españolas, haciéndote reir en ocasiones.

Yo ya estoy inmersa en el segundo libro.... qué pasará entre Judith y Eric???.

En Pídeme lo que quieras, ahora y siempre, lo diré.